Este itinerario busca acompañar, fortalecer y animar la vivencia del carisma marista en clave laical, ofreciendo un espacio de crecimiento humano, espiritual y comunitario. La Comunidad Belén será un lugar para compartir la fe, el servicio y la misión, siempre inspirados por el ejemplo de María y de san Marcelino Champagnat.
Confiamos a nuestra Buena Madre este nuevo inicio, pidiendo que ilumine y sostenga cada paso de su camino personal y comunitario.